Linda Mora/ Agencia Noticias La Fuente/

La desaparición de Oswaldo y Joshajani es un caso muy preocupante, especialmente considerando que habían ido a entregar medicamentos para el cáncer al puerto de Veracruz y no se ha vuelto a saber de ellos desde entonces.

La última llamada que recibieron sus familiares fue cuando Oswaldo envió un audio diciendo que no se encontraba en una buena situación, y después de eso, no hubo más comunicación.

Lo que es aún más inquietante es que el celular de Oswaldo marca como última ubicación una oficina del IPAX en el puerto de Veracruz, pero cuando se llamó a esa oficina, respondieron que los jóvenes no estaban detenidos allí.

Los familiares estén pidiendo justicia y celeridad en la investigación, ya que este caso es solo uno de los muchos que han ocurrido en Veracruz en los últimos meses. De hecho, se ha reportado que más de 200 niñas y adolescentes han desaparecido en el estado en solo 8 meses.

La fiscal general Verónica Hernández Giadans ha prometido investigar la desaparición, pero hasta ahora, no se ha obtenido ninguna respuesta sobre el paradero de los jóvenes.

La cooperativa Canna Veracruz, a la que pertenecen Oswaldo y Joshajani, se dedica a vender productos oncológicos a personas con cáncer, y esta era la segunda vez que Joshajani viajaba al puerto de Veracruz a hacer entregas.

Es importante que las autoridades tomen este caso con seriedad y trabajen para encontrar a los jóvenes lo antes posible.

La familia y los amigos de Oswaldo y Joshajani están en una situación muy difícil, y es fundamental que reciban apoyo y respuestas sobre lo que ha pasado con sus seres queridos.