Rosalinda Morales/ Agencia Noticias La Fuente/

Antonio Lozano Pineda es acusado de ser un presidente apócrifo de la Federación Mexicana de Atletismo debido a una disputa que comenzó en diciembre de 2013.

En ese momento, el vicepresidente Sergio Barajas convocó una Asamblea Extraordinaria sin autoridad, lo que llevó a una batalla legal que ha durado más de diez años.

La Comisión de Apelación y Arbitraje del Deporte (CAAD) declaró que la asamblea era inválida, y Antonio Lozano no tenía legitimidad para ser presidente.

A pesar de esto, Lozano sigue presentándose como presidente de la FMAA y enfrenta investigaciones por peculado, usurpación de funciones y fraude, además de tener un adeudo de más de 32 millones de pesos con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Por otro lado, Israel Benítez Morteo fue elegido presidente en una asamblea legítima y lidera un Consejo Directivo que sigue los Estatutos de la FMAA y la Ley General de Cultura Física y Deporte.

Benítez Morteo ha alertado a los atletas para que no paguen a Lozano para participar en Juegos CONADE, ya que la federación no les está cobrando el pase a nadie.